Las palabras no eran las correctas...

Las palabras no eran las correctas,
la idea no era la correcta,
ella no era la correcta,
y yo no era el correcto…
la ciudad no era la correcta,
el clima no era el correcto,
la empresa no era la correcta,
la calle no era la correcta…
el espejo no era el correcto,
el sombrero no era el correcto,
el perfume no era el correcto,
y el bar no era el correcto,
la respuesta, por supuesto, era una frase desafortunada,
mal interpretada y poco feliz para esa tarde donde lo único correcto era el momento.